La parroquia de San Pedro como tal, ha venido
funcionando desde la Edad Media, aunque el actual edificio es posterior. Se
empezó a construir a principios del siglo XVII y fue rehecho una vez iniciado
el siglo XVIII.
Del antiguo templo
solo se conserva el muro situado entre la plaza de las Flores y la de san
Pedro. Hay una puerta y sobre ella una imagen de obispo, tal vez, san
Fulgencio.
En 1611 Diego de Ergueta se compromete a hacer
las dos fachadas del templo (Archivo de Protocolos de Murcia), y parece
ser que en 1612 trabajó en esta fachada Melchor de Vallés.
La fachada principal es de estilo renacentista
pero con rasgos barrocos.
Todo el conjunto se remata con un frontispicio
triangular.
Como hemos indicado antes en la fachada hay dos
lápidas con los siguientes textos:
Arquitectura
La iglesia es de una sola nave con capillas
laterales comunicadas por un estrecho y bajo paso. Es decir, tiene planta de
cruz latina insertada en un rectángulo.
Crucero con pechinas decoradas con pinturas,
cintón circular y cúpula semiesférica con molduras mixtilíneas.
Al espacio central de la nave, sobre las capillas, se abren tribunas con
balconcillo que dan paso a un entablamento, encima del cual se levanta una
ventana en cada tramo.
Retablo todo de oro de Nicolás Rueda (1765) con
hornacina donde se encuentra la imagen de san Pedro. Debajo otra hornacina con
la imagen del Cristo de la Esperanza
Esculturas
·
Santa Bárbara, de la primera época de Salzillo.
·
San Crispín.
·
San Caralampio.
Pintura
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